El plan era odiarte

Brooke Llega a Nueva York con un simple propósito, quiere justicia, y sobre todo que los Calton paguen. Esa familia había dejado a sus padres sin nada, los había arruinado aprovechándose de su humildad y ella no quiere que queden impunes.
Pero una sola noche bastará para complicarlo todo. Una sonrisa tentadora y la mirada pasional de un tipo que no sabe lo que es un no por respuesta, es suficiente para descolocar por completo a Brooke. El problema viene cuando se encuentra cara a cara con el que será su jefe.
Cameron lo tiene todo, una novia bastante singular, mujeres con las que se puede acostar sin compromiso y ahora una mujer de la que solo consigue negativas a la vez que su interés por ella va en aumento.
Mentiras, discusiones, negativas y mucha tensión se va acumulando entre Brooke y Cameron. Lo que empieza como un juego o una tentación, puede provocar un sentimiento difícil de desaparecer.
¿Serán capaces de confiar uno en el otro?
¿O las mentiras serán tan fuertes como para alejarle por completo?